El canadiense John Raiman Martinelau se negó a que lo exportaran a su país, y por ello se causó él mismo, una herida.
Raiman Martinelau fue trasladado por la DIIP de Ancón a la sala de urgencia del Hospital Santo Tomás, ya que éste tenía un fuerte golpe en la cabeza.
Se conoció que el hombre se causó la herida contra una pared al darse golpes una y otra vez.
El extranjero no tenía papeles. En su desesperación, decía amenazas y gritaba improperios para que no lo mandaran a Migración, pero la estrategia no le funcionó, ya que las unidades no dudaron en conducirlo antes las autoridades competentes.