La pista de Río Hato no es más que un terreno de 190 hectáreas en donde no hay ninguna posibilidad de crecer, aseguró Eustacio Fábrega López, director de la Autoridad Aeronáutica Civil (AAC).
Esta pista que fue diseñada y construida durante la Segunda Guerra Mundial no tiene la capacidad física y estructural para aguantar pesos de aeronaves ni siquiera de las pequeñas que arriban en el aeropuerto de Tocumen. Sería una irresponsabilidad de este Gobierno acondicionar el aeropuerto de Río Hato para que en un tercer o cuarto aterrizaje se rompa la pista y no se pueda utilizar, manifestó Fábrega.
Con el traslado del aeropuerto de Río Hato, se podrá contar con otra terminal aérea que posea las especificaciones y amplitud de terreno que contribuya al crecimiento de la aviación panameña, agregó Fábrega. Otros proyectos de la AAC para el 2008 son la ampliación de los aeropuertos Marco A. Gelabert de Albrook y Enrique Malek en Chiriquí.