Pekín pondrá en marcha todas las medidas a su alcance para proporcionar tratamiento médico de calidad, respuestas eficaces en caso de emergencia y un estrecho control para evitar la propagación de enfermedades durante los JJOO de este verano.
"Pekín aunará esfuerzos con las ciudades coorganizadoras y provincias vecinas para fortalecer el control de información relacionada con enfermedades y hacer evaluaciones de riesgos de posibles accidentes sobre la salud pública", dijo el ministro de Salud chino, Chen Zhu.
Según Chen, se trata de prevenir, reducir y eliminar al máximo los riesgos para la salud durante los Juegos, aunque todavía deberán llevarse a cabo ejercicios y ensayos sobre cómo afrontar posibles crisis sanitarias.
Liu Zejun, director del Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Pekín, dijo que se controlará la propagación de enfermedades epidémicas, los grupos de incidencia de determinadas enfermedades, la desinfección de los hoteles, la seguridad del agua potable y del medioambiente.