A los chilibreños se les agotó la paciencia. Están cansados del mal servicio de buses y del pésimo estado de las calles.
Unas 1,500 familias que se concentran en los sectores de Quebrada Ancha y San Pablo han organizado una marcha para el 29 de noviembre, con el fin de llamar la atención de las autoridades y lograr soluciones inmediatas a estos dos problemas comunitarios. Los quejosos manifiestan que el servicio de buses de la ruta Chilibre es ineficiente, al igual que las condiciones de las calles.