El entrenador del Real Madrid, el portugués José Mourinho, reconoció ayer que "por un par de días" sintió y pensó como seleccionador de su país y que fue una sensación que le agradó.
"Estoy al mando de una nave gigantesca, que no se puede ni se debe abandonar por un minuto. El Real decidió bien", apuntó.
La Federación Portuguesa de Fútbol (FPF) intentó sin éxito contar con el técnico portugués para afrontar los encuentros ante Dinamarca e Islandia, valederos para el Euro 2012.