El adolescente de 13 años de edad, que supuestamente participó en el homicidio y entierro de la niña de 11 años, Karen Guerra Saldaña, se evadió ayer de la granja donde permanecía bajo custodia de las autoridades en Potrerillos.
A últimas horas de la tarde la Policía Nacional recibió el reporte sobre la desaparición del menor que, supuestamente, pudo haberse internado entre el abundante monte del sector que debe ser bien conocido por él.
La noticia inmediatamente cayó como un balde de agua fría sobre los residentes de la cercana comunidad de Rovira Abajo, donde todavía existe consternación por la forma tan cruel y despiadada como mataron a la sobresaliente estudiante.
Todavía en la noche, y bajo una fuerte lluvia, se observaban varias rondas policiales en el sector buscando al evadido.