Por culpa de nuestro idiota Código de Trabajo y de algunos gobernantes muy parecidos unos a otros en esta República paternal, suceden anomalías que solamente abonan comentarios adversarios en la ciudadanía, pero que en países como China, por menos codicia, simplemente adviene la pena capital y punto. Me parece que en Panamá, todo depende del momento y cuál sea el entronque con el gobierno de turno para que aparezca el respaldo financiero y se paguen semejantes partidas por vacaciones acumuladas, fuesen estos magistrados de cualquiera tribunal, tenga o no, que ver con la injustificada Ampliación del Canal u otras conveniencias.
La desverg�enza que nos compara con el peor de los países corruptos, es que no haya dinero para aliviar las necesidades en los estratos más bajos de la población con políticas bien pensadas y presupuestadas y sin embargo aparezca dinero, rápido y fresco, para pagarle vacaciones acumuladas a funcionarios que ganan diez mil balboas mensuales.
Si yo fuera el señor Contralor, me averiguaría si estos empleados públicos que supuestamente se pagaron vacaciones acumuladas por diez y hasta quince meses, no aparecen registrados en los Westgate Resort Owner de Orlando Florida, en las agencias de viajes que llevan a uno al país de Micky Mouse, o en las entradas y salidas del aeropuerto principal de este paraíso panameño.
Por otro lado, casi dos millones y medio de descamisados como usted se preguntan todos los días, �cuándo se va a establecer una rigurosa cordura en los manejos de los caudales públicos?...�Cuándo se castigará con severidad el derroche de los fondos nacionales, cuándo se suprimirán todas las erogaciones superfluas, los empleos innecesarios (�asesores?), y las mal disfrazadas gratificaciones?.
Las riadas de los panameños recién graduados buscando trabajo, debe conmover o poner a pensar a los políticos que debemos cambiar de rumbo, levantar la conciencia nacional a la mayor altura posible, cultivar el civismo y establecer el empleo de la moralidad pública.