Transportistas panameños de carga iniciaron ayer un paro indefinido en la frontera entre Panamá y Costa Rica, para llamar la atención de las autoridades.
Rafael Araúz, secretario de defensa de la Cámara Nacional de Transporte de Carga, dijo que la medida es para que el Gobierno haga cumplir las leyes que impiden que sus colegas extranjeros brinden el servicio de carga internacional, desde Panamá.
"A nosotros el Gobierno no nos protege, porque allá en Colón, por ejemplo, están triangulando la carga, o sea que la sacan del área franca y la llevan a otros recintos donde los centroamericanos la recogen", mencionó.
Desde la mañana de ayer sábado, poco a poco fueron llegando los camiones que eran estacionados a orilla de la carretera Interamericana, a pocos metros del edificio de salida del país.
El movimiento también es apoyado por los transportistas de tierras altas, quienes no descartan suspender el traslado de productos agrícolas hacia la ciudad capital, debido a que el costo de combustible los afecta notablemente.
Los transportistas serán recibidos por la ministra Carmen Gisela Vergara, el martes, pero mientras, el paro continúa.