Manuel De Jesús Caballero, de 25 años, era padre de dos hijos: una niña de 6 años y un niño de 2 años.
Estaba casado con la maestra Lidia Castaño, con quien residía en San Isidro, en San Miguelito.
Era el segundo de seis hermanos, y muchos de los que lo conocían lo consideraban un hombre tranquilo y de buen corazón.
El día de su muerte pasó por la casa de su abuela y de su padre en La Cabima, Alcalde Díaz; después fue a visitar a algunos amigos en Don Bosco, Veranillo, donde residió anteriormente.
Cuando los familiares vieron las noticias en la TV, reconocieron que la víctima en El Veredón, era " Manolo", por las zapatillas que tenía puestas.
Su madre, Sol, reside en Estados Unidos, y está destrozada emocionalmente.
La familia no se explica cuál pudo ser el móvil de ese homicidio.