El estacionamiento de la Iglesia Del Carmen, en la vía España, se quedó pequeño para los familiares y conocidos que llegaron a darle el último adiós al abogado Manuel Antonio Caballero Pérez, de 49 años, asesinado el pasado 31 de mayo.
Dentro del ataúd chocolate, Manuel Antonio estaba vestido con un saco negro, camisa blanca y una corbata celeste a rayas. Sobre él reposaba un hermoso ramo de flores con la leyenda: "De sus padres y hermanos".
La tragedia ocurrió en el selecto barrio capitalino El Cangrejo, en el corregimiento de Bella Vista, cerca del monumento de Einstein.
Testigos señalaron que unos sujetos viajaban en un auto color rojo; esperaron a que el abogado saliera de la lavandería y lavamático 'Fan Clean', cercano a la vía Argentina, y le dispararon.
El hoy occiso fue herido con un arma de fuego en la espalda y cerca al cuello. Falleció aproximadamente a las 3: 10 de la tarde del citado día.
A Pérez se le dio cristiana sepultura en el Jardín de Paz, en Santa Elena, corregimiento de Parque Lefevre, el pasado viernes.