domingo 10 de mayo de 2009

 

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  CONSULTORIO MEDICO


�Por qué me duele cuando camino?

Por la Universidad de Harvard | � 2008 United Feature Syndicate. Derechos Reservados.

P: Para mejorar mi salud, he empezado un programa regular de caminata, pero mis piernas se cansan y se sienten pesadas. También, me dan calambres dolorosos. Mi médico dice que tengo artritis. �Qué más me puede estar pasando?
R:
Las investigaciones muestran que la actividad física reduce el riesgo de desarrollar enfermedades cardíacas, algunos cánceres y otras enfermedades. Pero como está viendo, andar puede ser difícil para algunas personas. Cuatro condiciones que pueden causar síntomas como los suyos son la enfermedad de la arteria periférica, insuficiencia venosa crónica, estenosis espinal lumbar y la neuropatía diabética.

1. La enfermedad de la arteria periférica (PAD en inglés) es una forma de ateroesclerosis, la condición que lleva a la mayoría de los ataques de corazón y apoplegías. Las placas llenas de colesterol estrechan las arterias que llevan sangre a los músculos de las piernas, reduciendo el flujo sanguíneo y privando de oxígeno a los músculos. El síntoma clásico es un calambrazo de la arteria estrechada. El dolor se puede producir en cualquier parte de la pierna pero con más frecuencia en la pantorrilla. Tiende a aparecer cuando está andando y se va cuando descansa.

Por sí misma, la enfermedad de la arteria periférica puede ser seria y debilitante. Pero también puede indicar problemas en otro lugar. Las personas con enfermedad de la arteria periférica tiene seis o siete veces más probabilidades de tener un ataque de corazón y apoplegía que las personas que no la padecen, por lo que el controlar los factores de riesgo, como fumar, colesterol alto, presión sanguínea alta, es crítico.

Los programas de ejercicios estructurados pueden ayudar. Estos programas normalmente involucran andar hasta que duela, descansar hasta que desaparezca el dolor y andar de nuevo. Estas sesiones de andar-descansar-andar son más efectivas cuando se hacen cada 30 minutos al día varias veces por semana.

Su médico podría recomendarle bajas dosis de aspirina para reducir su riesgo de ataque cardíaco y apoplegía. También podría beneficiarse de medicación o dieta para reducir la presión sanguínea alta y el colesterol.

2. La insuficiencia venosa crónica también es debido a la mala circulación, pero afecta a las venas. Típicamente, la sangre fluye más lentamente por las venas y arterias. Válvulas diminutas adentro de las venas evitan que la sangre vaya hacia atrás.

En las personas con insuficiencia venosa crónica, las válculas venosas están dañadas, por lo que la sangre forma piscinas en pies y piernas. Los síntomas incluyen hinchazón, inflamación y ulceraciones, heridas abiertas en los talones. Las piernas podrían sentirse doloridas o pesadas.

Puede ayudar elevar las piernas para que la sangre fluya hacia el corazón. Si usted está sentado por largos periodos de tiempo, mover sus dedos de los pies arriba y abajo varias veces puede flexionar los músculos de las piernas que bombean a las venas. También puede probar las medias de comprensión que mantienen el flujo sanguíneo hacia el corazón apretando más fuerte en el talón que en la rodilla.

3. La estenosis espinal se produce cuando la artritis de la espina dorsal, discos inflamados u otros problemas ponen presión sobre la columna y los nervios que salen de ella. El dolor nace de la presión, y tal vez de una reducción en la cantidad de sangre que los nervios necesitan.

El dolor en la parte baja de la espalda puede ser un síntoma de estenosis espinal, especialmente cuando se produce en la región lumbar, la sección de la columna que forma la curva de abajo. Pero también se ven las piernas afectadas con frecuencia. El dolor puede ser similar al producido por la enfermedad de la arteria periférica: calambrazos que aumentan al andar, pero se siente en la parte de arriba y no en la pantorrilla. Las piernas también se pueden sentir débiles y dormidas. Aunque los pacientes podrían tener problemas al andar, muchos pueden montar en bicicleta pues la postura flexionada reduce la presión del nervio.

El tratamiento normalmente empieza con terapia física y ejercicios para fortalecer la espalda y los músculos abdominales. También pueden ayudar los calmantes. La cirugía es efectiva para casos avanzados.

4. La neuropatía diabética es el término para el nervio dañado en personas con diabetes. Exactamente por qué se produce está poco claro, pero los niveles altos de azúcar en sangre podrían dañar los vasos sanguíneos que proveen a los nervios, dejándoles sin oxígeno.

La neuropatía diabética afecta a las partes altas y bajas de las piernas diferentemente. En los muslos, el dolor puede venir súbitamente y sólo en una pierna. En la parte baja de la piernas y pies, donde es más común, los síntomas son típicamente adormecimiento y cosquilleo, y se sienten normalmente en ambas piernas. El daño al nervio con frecuencia entorpece la habilidad para sentir el tejido dañado, por lo que las heridas en los pies pasan inadvertidas y empeoran. La neuropatía diabética puede hacer que andar sea difícil, pero los síntomas pueden mejorar con ejercicio.

Las personas con diabetes pueden reducir sus probabilidades de desarrollar neuropatía manteniendo sus niveles de azúcar bajos. Es menos cierto que el control exhaustivo de azúcar en sangre es útil una vez que los nervios han sido dañados. Aún así, es una meta importante por otras razones. Las medicaciones pueden controlar la sensación de quemazón y cosquilleo.

Debería añadir ejercicios a su rutina diaria, pero los síntomas que describe son preocupantes. Revise su historial médico con su doctor, describa sus síntomas y hable de estos cuatro síntomas médicos. Juntos, pueden crear un plan para calmar el dolor y mantenerse en movimiento.

 

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