Los directivos de la NBA, encargados de la disciplina dentro de la competición de liga, han sorprendido con estar más preocupados por el posible abandono de Lamar Odom del banquillo que por la dura entrada que Trevor Ariza le hizo al jugador español Rudy Fernández.
Las acciones ocurrieron en el Rose Garden de Portland durante el partido que los Trail Blazers ganaron por 111-94 a Lakers, y Fernández tuvo que salir en camilla del campo.
El comité de disciplina de la NBA ya hizo la primera revisión, y en principio Ariza no será el centro de atención ni será suspendido por la entrada violenta que le hizo a Fernández.
Por el contrario, de acuerdo al vicepresidente de operaciones de la NBA, Stu Jackson, Ariza no tendrá ningún tipo de castigo especial por su acción contra Fernández, que terminó en el hospital.