Indudablemente, el año 2004 ha dejado un sabor amargo en su final, hoy 31 de diciembre, con el cataclismo que la humanidad ha sido testigo en sudeste de Asia.
Agencias humanitarias y expertos creen que la cifra de muertos total rondaría entre 120,000 hasta 200,000.
Decenas de miles continúan desaparecidos en ocho países en la zona afectada.
Nuevas secuelas tras del maremoto se han comenzado a sentir. El volcán de la pequeña isla de Barren (en el archipiélago de Andaman y con 2.000 habitantes), se produjo el martes y obligó a la evacuación de los habitantes en un radio de 500 metros.
También, una alerta de nuevos maremotos provocó la evacuación de miles de personas de las costas del sur de la India.
Unos 500 millones de dólares es el monto ofrecido hasta ahora por la comunidad internacional para socorrer a las víctimas del maremoto en las costas del Oceano Indico, dijo el secretario general de las Naciones Unidas (ONU), Kofi Annan.
"Tenemos una buena respuesta", declaró Annan.