Viernes 29 de diciembre, 11 de la mañana, casa de Julio César Dely Valdés. Entramos a una de las mansiones construidas en el exclusivo residencial Camino de Cruces, carretera a Albrook. Una vez adentro, Julio César nos condujo hacia su palacio, un lugar donde en el cielo raso se dibuja una cancha de fútbol y, tal vez, el lugar más acogedor para hablar del deporte que le dio tanta gloria y retrotraer los mejores momentos de su majestuosa carrera profesional.
"El Panagol" comenzó por mostrarnos sus recuerdos en los clubes donde participó (Deportivo Paraguayo, Nacional, Cagliari, París St. Germain, Oviedo y Málaga) y la selección de Panamá. En el santuario de Dely Valdés, también se puede observar una gran colección de trofeos, copas y medallas, al igual que muchos recortes de periódicos y artículos relacionados con su carrera deportiva.
Tras esta breve introducción, arrancó el diálogo con el gran futbolista y ahora técnico de la selección nacional Sub-20 de Panamá.
DE JUGADOR A TéCNICO
No hay duda de que por sus venas todavía corre la sangre del futbolista, la de aquellas tardes y noches de Montevideo, París, Cagliari, Oviedo o Málaga, donde hacía sonreír con sus goles a hombres, mujeres, niños y ancianos, a todos por igual. A sus 39 años, su físico no muestra para nada que lleva más de un año fuera de la actividad; por el contrario, se nota que aún podría dar minutos de diversión si se calzara las botas que están colgadas en la pared de su casa.
El ahora técnico de la Sub-20 habló de su cambio de jugador a entrenador, algo que tenía en mente, pero se dio más rápido de lo que esperaba. "Yo pensaba dejar el fútbol y entrenar, pero las cosas se han dado muy rápido", acotó.
"No me gusta que en el entorno comparen lo que hice como futbolista, con lo que soy ahora como entrenador", añadió.
Para "El Panagol", es difícil trabajar con chicos menores de 20 años por la idiosincrasia de nuestro fútbol: "Aquí es muy difícil, yo pude haber dicho que no iba a entrenar aquí en Panamá, pues carecemos de muchas cosas".
"Trabajar con niños era un anhelo que tenía con Jorge y otros profesionales de Panamá. Sin embargo, finalizada mi carrera, a mí me ofrecieron quedarme en Málaga trabajando e, incluso, que siguiera jugando una temporada más en el fútbol. Allá, tengo las puertas abiertas para regresar en cualquier momento", agregó.
Por ahora, Julio no se ha planteado dirigir un equipo nacional, porque las cosas se han dado de otra manera, pero lo ve como una posibilidad para el futuro.
En cuanto a las críticas que ha recibido ahora como técnico, dijo: "Uno recibe las críticas y tiene que trabajar. Las recibí como futbolista y como técnico igual, la clave es trabajar para conseguir lo que uno se propone en la vida. No hay que hacer mucho caso, sino concentrarse en hacer las cosas bien. Si yo hago un balance general de mi carrera, es positivo".
EL CAMERINO DE JULIO
Julio Dely describió su vestuario de la siguiente manera: "Cuando estamos cerca de una competición, intentamos transmitirle tranquilidada los futbolistas, siempre con seriedad. Es importante cuando se está cerca de una competición bajar la tensión con bromas, es bueno mantener el sentido del humor en el vestuario".
¿Qué le diría a sus jugadores cinco minutos antes del primer juego el 17 de enero con Guatemala?
"Lo que hago en todos los partidos. Recordarles lo que tienen que hacer. Tanto Jorge como yo, les hablamos de lo que es la pelota quieta, no darle la espalda al balón.. hay una sola pelota y no se puede perder de vista".
LA SUB-20
El DT lo tiene claro: hay que clasificar al Mundial de Canadá. "Para el pueblo panameño, los dirigentes y, por lo que han hecho las dos selecciones anteriores Sub-20, tenemos que clasificar, pero hay una gran verdad: esta selección no tiene la preparación ni los fogueos que tuvieron las dos selecciones anteriores".
"A cualquier panameño no le interesa si tuvimos o tenemos partidos de preparación, tenemos que clasificar, esa es la realidad. Las dos anteriores selecciones tuvieron un presupuesto muy alto y ésta no lo tiene", puntualizó.
¿Y si no se consigue el objetivo? "Si no se consigue, hay que superarlo y seguir trabajando, pero te repito, tenemos que clasificar".
EL FúTBOL TRAS EL RETIRO
Para Julio, lo más difícil del retiro como futbolista fue dejar España. "Al principio, cuando dejé España, sí extrañaba mucho el fútbol. Cuando salgo de allí, dejo el fútbol competitivo, porque a Uruguay fui tres meses a retirarme y luego vine a Panamá para estar más con la familia.. Fue entonces que comencé a extrañar el tema de los vestuarios, los viajes y partidos", aseguró.
"El Panagol" comentó que le da seguimiento, siempre que pueda, a la Liga Española, la Inglesa y al Málaga, su último club en España.
CONSEJO A SUS COLEGAS
Julio se considera un agradecido del fútbol. Para él, es clave mantener la humildad y no cambiar en nada la forma de pensar a pesar de tener más que antes.
"Yo le he dado al fútbol y el fútbol me ha dado a mí. He hablado en mi casa con algunos jugadores importantes de la selección mayor de Panamá, y les he dicho que quiero que en un futuro muchos tengan lo que yo he logrado en el fútbol. No quiero decir los nombres, pero hoy varios de ellos lo pueden tener porque juegan en un fútbol importante".
"Yo seguiré trabajando en el fútbol de Panamá, si es a nivel juvenil mejor todavía, me gustaría que en un futuro puedan salir mejores jugadores que los Dely Valdés, Rommel Fernández o René Mendieta", agregó.
RáPIDAS CON DELY VALDéS..
- Si no hubiese sido delantero, ¿qué sería?
- Defensa central, siempre dije que quería terminar en esa posición. Incluso, jugué unos partidos con el Oviedo y con la selección lo hice una vez en Nicaragua.
Y si no hubieras sido futbolista, ¿qué serías?
Profesor de Educación Física.
¿Qué piensas de la política?
No entiendo mucho, ni siquiera me gusta opinar.
¿Aspirarías a un cargo político?
Muchas veces me han dicho eso. Para hacerlo, tendría que entender un poquito; si algún día llegaría a entender un poquito, no sé.
¿Te gustaría que tus hijos fueran futbolistas?
No es algo que yo digo.. ¡huy, me gustaría! En los países de fútbol, los padres que sacan un varón quieren que sea futbolista, yo no. Es una decisión que tiene que tomar él. Por ejemplo, a mi hijo Jordan, que tiene 11 años, le encanta el fútbol. Yo he hablado con él y le he dicho que no es fácil. Por ahora, está en una selección de zona en España y hace muchos goles.
¿El nombre de tu hijo fue en homenaje al jugador de baloncesto Michael Jordan?
Sí, mi ídolo, por algo tiene un lugar en mi rinconcito. Jordan nació en Francia, al igual que Juliet, la niña, que tiene 9 años. Jair, de 7 meses, nació en Panamá.
¿Qué piensas del amor?
¿El amor? Jesucristo es amor para mí. Yo amo a Jesucristo. Siempre he dicho que Dios tiene una cosa para cada uno.
¿Rezas, vas a la iglesia, caminas procesiones? No. Creo en Dios y punto. A la iglesia voy algunas veces.
¿La mujer ideal de Julio Dely?
Risas.. (mira a su esposa María José, que en ese momento entra al recinto). En ella he encontrado mi media mitad.
¿Qué país te gusta visitar?
España (tierra de su esposa María José y donde residen sus hijos: Jordan y Juliet), aunque está muy lejos, y Uruguay.
¿HACES TURISMO?
No, soy más de casa. A veces voy al Causeway (Calzada de Amador).
¿DóNDE PASARáS AñO NUEVO?
Estaré aquí en casa, con familiares.. tranquilo.