Como un obsequio navideño o como un detalle para decorar tu mesa, estas fiestas pueden ser diferentes si pones un poquito de tu imaginación y mucha azúcar a tu vida.
Noor Stephanie Díaz es una chica que creció en medio de enseres de cocina, pues desde hace 15 años su madre se dedicaba a la venta de accesorios de cocina y a dar cursos de cocina para niños y adultos.
Siguiendo los pasos de su progenitora, aprendió a cocinar, y fue incursionando en la venta de dulces de estilo moderno y las galletas decoradas, estando en la escuela. Al salir de la secundaria, decide estudiar administración de empresa y adherirse a las filas del negocio familiar, L' Petit Gourmet Panama.
Hoy, además de dedicarse a la venta de enseres de cocina, brinda cursos para adultos y niños que en tiempo de Navidad se fijan en la decoración de Casitas de Gengibre tipo Hansel y Gretel, en donde se aprende a crear estos detalles como una opción de regalo o para decorar. Los cursos son dictados en horario de 4: 00 p.m. los días 21, 22 ó 23 de diciembre a un costo de B
25.00 en la sucursal de Calle 75 San Francisco, frente a la parada de buses del Rey, Calle 50.
Familias completas toman esta opción para compartir especialmente en las vacaciones de los más pequeños y qué decir de los cumpleaños que se organizan con esta opción navideña.
Noor Stephanie, quien además es Chef pastelera, asegura que para esta fecha se incrementa la venta de galletas navideñas, dulces de frutas, galletas de avena personalizada y cena navideña, en general.
El sistema personalizado garantiza el sabor que tengas en mente tanto en la masa como en el "icing" y "fondant", aprendido en cursos de decoración de Wilton los programas de Ace of Cakes y con la ayuda de su madre.
"Lo más difícil de esta profesión es hacer dieta con tantos dulces deliciosos", afirma la chica, quien dice que una buena recomendación navideña es regalar, por lo menos, un dulce de frutas que dejará hablando a todos de tu detallazo.
Para preparar un detalle como este se toma alrededor de un día de trabajo y por lo menos tres horas las galletas más fáciles.