Una vigilia de amor! Eso es lo que representa la Teletón 20-30, que inició anoche en ATLAPA, para contribuir a una meta en común: dotar de equipos a centros de rehabilitación en beneficio de la niñez humilde.
Un derroche de talentos artísticos; de invitaciones a la ciudadanía para que aporte su granito de arena y de concienciación al público para que se una a la causa, caracterizan al evento único en su clase en todo Panamá. Es el momento ideal para demostrar el verdadero significado de la Navidad: compartir y dar sin mezquindad.
También es la oportunidad para inculcar en la familia, sobre todo en los más pequeños, los valores humanos como solidaridad, humildad, compasión y sobre todo, el amor hacia el prójimo, resaltando que aunque la cantidad de la donación es importante, más lo es el sentimiento que la mueve, aunque ésta sea mínima.
En ese marco, hay que reconocer la ardua labor que realiza la organización de la Teletón que por muchos años se ha dedicado a recolectar fondos construyendo y organizando diversos proyectos para canalizarlos en beneficio de la niñez.
Este año, el Niño Símbolo de la Teletón 20-30, José Luis González, tiene nueve años de edad, pero que con tan corta edad invita a la vida con su energía, inocencia y esperanza en el ser humano. Pese a las limitaciones que ha sufrido desde su nacimiento (sin sus cuatro extremidades) mantiene viva la sonrisa en su rostro, y su carisma lo hace ser adorable para aquel que lo conoce.
Por eso, hoy, por José Luis y por toda la niñez panameña impedida que espera en un hospital o en una humilde cama en cualquier rincón del país por la solidaridad del pueblo panameño, grite con emoción "Yo soy la Teletón".