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Mentir es un acto al que todos recurimos, trata de que no se vuelva un hábito  |
Las más famosas canciones de todos los géneros han dedicado sus letras a la justificación de una mentira... convirtiéndola en un mal necesario. La sensual voz de Charlie Cardona entonó alguna vez "quién no dice una mentira por conservar un amor".
Hoy no faltan quienes se apoyen en esta premisa para darle razón a aquello que los psicólogos consideran una enfermedad: la mentira. Claudio González es un hombre apuesto, formal y de un corazón noble, a quien difícilmente una mujer le diría no, si le invita a un helado, un almuerzo o tal vez ir a bailar, pero ¿qué será lo que pasa con el que no puede tener un levante en serio? ¡Ay...Claudio es mentiroso!
Según la psicóloga Patricia Jurado, la mentira es una expresión que todos manifestamos y decimos, sólo que existen algunas personas que no la pueden controlar porque la padecen como enfermedad. Mencionó que esta enfermedad se conoce con el nombre de mitomanía. La cual se define como la tendencia patológica a falsear la verdad, a la fabulación consciente y a la simulación de estados orgánicos anormales.
Dijo que esta forma de decir lo contrario de lo que sabe, cree y piensa se ha convertido en la principal ruptura de noviazgos, matrimonios, amistades, inclusive relaciones familiares de padres a hijos. Señaló que mentir es bueno, siempre y cuando uno lo haga para no herir a la persona que se ama o aprecia, mas no cuando se quiere deshacer de alguien y lo manifiesta como una forma de solución a ese problema.
Jurado manifestó que ahora por lo que acaban de leer no significa que no harán esto más, todos cometemos errores y podemos decir mentiras que no afecten nuestra manera de vivir, pensar y oír, pero no hay que exagerar.
EL ROL SOCIAL DE LA MENTIRA
La mentira es públicamente condenada, pero todo el mundo la practica en su mundo privado y está inserta en todos los procesos de interacción social cumpliendo funciones de manipulación, formación de impresiones, fortalecimiento de autoconfianza y socialización.
El ser honesto aumenta la comunicación entre los individuos, mejora la comprensión y predice ideas, sentimientos y acciones de otros, mientras que la deshonestidad, provoca, generalmente, alta disonancia cognoscitiva. |