El negocio portuario sigue siendo uno de los atractivos más grandes para los inversionistas de otros lados.
La modernización de cada uno de los equipos que se utilizan en este mercado es sumamente importante y por ello cada una de las tres empresas que se dedican al negocio de transporte de contenedores en Panamá, compiten en aras de ganar una mayor cantidad de clientes en lo que al tema portuario se refiere.
Solamente Panamá Ports Company (PPC) tiene en mente superar-al terminar el año-el movimiento del millón de contenedores.
Prueba de ello es que hace unos días llegaron a Panamá dos grúas Pórtico Súper Post-Panamax, las cuales fueron instaladas en el puerto de Balboa.
Ambas forman parte de la PPC, la cual tiene la concesión para la operación de los puertos de Balboa y Cristóbal, ambos localizados en los extremos del Canal de Panamá y cuya instalación favorece la carga de las rutas del Atlántico y el Pacífico.
Dichas grúas tienen la capacidad para manejar dos contendedores de manera simultánea a una altura que puede alcanzar los 36 metros y cuyo alcance de 51 metros le permite alcanzar hasta 19 filas de contenedores.
Para nadie es un secreto que el panorama portuario de Panamá en los últimos años, se ha disparado.
Alejandro, gerente de PPC, señaló que para el período 2007-2008 se traerán a Panamá cuatro grúas más de este tipo, las cuales tienen un costo aproximado de 7 millones de dólares cada una.
Estas grúas tienen la capacidad para atender los barcos Post-Panamax, los cuales son los llamados a marcar la tónica del mundo portuario.
Con estas dos, al puerto de Balboa le han llegado 5 grúas en lo que va del presente año, mientras que en Cristóbal se han trasladado cuatro, lo que ayudará, según Kouruklis, a que este año se supere el millón de contenedores que se han movido en lo que va del 2006.
El reto que se avecina en el mundo naviero para estas empresas que se han instalado en Panamá, es grande, ya que la meta de PPC es convertir pronto la terminal de Balboa en un megapuerto, los cual llevaría una inversión de unos mil millones de dólares para este fin.
¿Lo conseguirán? La cosa es que el negocio portuario está en uno de sus mejores momentos y los que deseen marcar la tónica en el mundo naviero, tendrán que ver el futuro con luces largas.