Un hombre de 27 años llegó a su casa en la barriada Villa Mónica, en Aguadulce, a eso de las 5: 30 de la madrugada de ayer, viernes, pidiéndole comida a su madre.
Al decirle que no había sobrado nada de la cena, se molestó y se agarró a puños con su hermano mayor; después quemó la ropa y las llamas consumieron su propia habitación. La barriada quedó cubierta de humo y algunos pensaron que era neblina hasta que se percataron de lo que ocurría.
Las unidades de la Policía Nacional llegaron al lugar y convencieron al hombre para que saliera del baño que estaba lleno de humo.
Los bomberos sofocaron el siniestro evitando que se propagara al resto de las habitaciones de la casa. El incendiario fue puesto en libertad porque no presentaron denuncia.