Un escolta murió en un atentado contra un fiscal encargado de casos de terrorismo, tráfico de drogas y corrupción de funcionarios.
El fiscal Mateo Castañeda titular de la primera Fiscalía Especializada en Criminalidad Organizada que investiga numerosos casos de terrorismo, tráfico de drogas y corrupción de funcionarios, se encontraba en la residencia de un amigo, cuando ocurrió el atentado en el que murió su escolta.
El suboficial de la Policía Carlos Imata se encontraba dentro del vehículo cuando recibió los disparos de los desconocidos.