El panameño ha seguido muy de cerca el escándalo ocasionado por una empresa, a la que se le confió la confección del importante documento de nuestra cédula de identidad con las consecuencias por todos conocidas.
Se aduce que la empresa tenía buen prestigio internacional, lo que ocasionó la confianza del Tribunal Electoral pero en realidad no era merecedora.
Sin embargo, las empresas panameñas, como por ejemplo la que imprime nuestros billetes de lotería no se le conoce en el pasado, que haya en sus instalaciones falsificación de este documento .
Los magistrados, quienes tienen un prestigio cimentado en las ejemplares elecciones del pasado, salieron al paso e inclusive han reconocido y adoptado posiciones correctivas para que en un futuro no se vuelvan a repetir estas bochornosas situaciones, que causan pena nacional y burla en el extranjero.
La ciudadanía esperó la reacción de los partidos políticos, que en forma unánime respaldaron con madurez, al darle un voto de confianza al Tribunal Electoral, posicióna la que se unió también la Presidenta de la República.
El Periódico El Panamá América del 28 de noviembre, resume la postura de todos los sectores en forma constructiva, porque ir a una posición cómoda, como pedir la renuncia de los magistrados, estaríamos cayendo en un vacío peligroso ante el torneo electoral que se avecinda en el 2004. |