La solicitud de un bono de 40 balboas para la compra de pavo y jamón en diciembre, incluida en la contrapropuesta presentada ayer por los jubilados, no fue vista con buenos ojos por el ministro de la Presidencia, Jimmy Papadimitriu.
El funcionario indicó que no se puede caer en un círculo vicioso de regalar por regalar y que el presidente de la República no le prometió a los jubilados "ni pavo ni jamón, sino aumentos", por lo que debe definirse de dónde se sacarán estos fondos, y el impacto que tendrá en la economía.
La iniciativa del gremio, plasmada en un documento entregado por el dirigente Eladio Fernández, se basa en que durante las fiestas navideñas los pensionados y jubilados que reciben menos de 250 balboas, no cobrarían el aumento de 50 balboas.
Los jubilados también propusieron al Gobierno la creación de un fideicomiso de B/500 millones, que servirá para otorgar el aumento cada dos años.