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La directora regional de Educación en Panamá Oeste, Miriam Aguilar, reconoció que es necesario suspender las clases en los centros escolares del sector Oeste, cuando se quedan sin agua potable para no exponer la salud de los estudiantes a enfermedades o epidemias de graves consecuencias.
"Varios centros escolares en las últimas semanas se han visto en la necesidad de suspender las clases hasta dos días continuos por la falta del vital líquido y esta medida es para evitar que los niños se expongan a enfermedades", reveló la funcionaria.
Dijo que los planteles escolares que se vieron obligados a perder clases por el problema de la falta de agua fueron el centro básico de Nuevo Arraiján, residencial Vista Alegre y la escuela d Nuevo Chorrillo entre otros.
Manifestó que a los niños se les dificulta hacer sus necesidades fisiológicas por la falta de agua que muchas veces por la escasez ni siquiera cuentan con reservas para el consumo y lavarse las manos. |
