La escopeta con la cual se intentó disparar en perjuico del evangélico Julio Palacio, de 18 años, asesinado el jueves pasado, fue recuperada por la Policía.
Según una fuente, el arma de fuego se mantiene a órdenes de la DIIP de Santa Marta, la cual resolvió el crimen de Palacio.
Una fuente dijo que el homicidio de Julio Palacio se llevó a cabo para ganar gracia dentro del grupo delictivo.
La víctima fue considerada por la comunidad como una persona tranquila y que no ameritaba que le quitaran la vida de esa forma.
Julio Palacio fue asesinado de dos impactos de bala en la cabeza.
Palacio fue baleado en El Valle de Santa Marta, y dos horas después le decretaron la muerte en el Hospital Santo Tomás.