Las elecciones locales de Kosovo, las primeras organizadas desde que esta antigua provincia serbia declarara su independencia en febrero de 2008, se desarrollaron ayer en calma, sin incidentes y con una participación notable entre la minoría serbia.
Entre los estimados 120.000 serbios de Kosovo, contrarios a la independencia, la asistencia a las urnas varió mucho entre el norte del país y las enclaves del centro y sur.
Mientras que en el norte la participación no llegó al 1 por ciento, en los enclaves alcanzó en algunos lugares el 8 por ciento, porcentaje considerado elevado.
La Comisión Electoral reconoció que en algunos municipios se registraron problemas técnicos menores.