Esto ocurrió hace años, cuando "pateaba calles" como periodista buscando noticias. En el país se había desatado una guerra de anuncios publicitarios, en periódicos, TV y radio. Varios empresarios, con la publicidad luchaban por convencer al comprador panameño.El anzuelo era que sus productos tenían una sustancia distinta a los otros. La carnada indicaba que esa sustancia le daba ventajas a quien consumía tal o cual producto.
No recuerdo qué fue lo que motivó a unos importadores (los que traen productos del exterior) a aclararle las cosas a los periodistas.
Lo cierto es que nos reunieron en una conferencia de prensa. Nos llevaron hasta un enorme galpón refrigerado.
En el medio había un enorme "tuco" de mantequilla. Era algo enorme, como dos o tres carros encima del otro.
Nos quedamos con la boca abierta, pues estábamos acostumbrados a ver el cuartito de mantequilla, bastante chiquito.
Entonces habló el gerente de la empresa. Sin pelos en la lengua dijo que así venía la mantequilla a Panamá. Llegaba en barcos especiales y entonces ellos... cortaban en pedazos más pequeños la enorme mole.
Y vendían esos trozos a diferentes empresas panameñas, que las empaquetaban con diferentes nombres.
En resumen, era la misma mantequilla con diferentes nombres y marcas. Sencillamente, era falso que una tuviera esto y la otra no.
Luego otro exportador nos remató esta realidad. Dijo que la gasolina se vendía con el mismo surtidor (manguera) a todas las empresas que funcionaban en Panamá.
Esto era así porque en esa época la gasolina se refinaba en Colón, en un solo lugar.
Cuando se le preguntó sobre los aditivos y sustancias especiales que promocionaban algunas marcas, se encogió de hombros y afirmó:
"Esto lo echarán cuando el combustible esté en sus camiones. Confírmenlo ustedes, periodistas".
Otros productos iguales eran detergentes, algunas pinturas, alcoholes, etc.
Siempre recuerdo esa impactante conferencia de prensa cuando escucho que tal producto es mejor que el otro, porque tiene "algo especial". Realmente no sé si ahora eso sea verdad...
