El diccionario presenta dos definiciones de la palabra periodista. En una de ella lo define como la persona que compone, escribe o edita un periódico y, en la otra, como la persona que, profesionalmente, prepara o presenta las noticias en un periódico o en otro medio de difusión. A ambas definiciones les faltó mencionar que es la persona que arriesga su vida para que los demás ciudadanos estén informados.
Las estadísticas demuestran que el periodismo sigue siendo la profesión más peligrosa del mundo debido a las bajas que se dan cotidianamente en los diferentes acontecimientos en los cinco continentes.
El periodista es objeto de represión y de intentos de censura y esto le obliga a zafarse de una serie de trabas que le ponen los gobiernos represivos que atentan contra la libertad de expresión.
La fecha es exacta para honrar la memoria de aquellos paladines de la pluma que han muerto en el ejercicio de su deber. Hoy es un día para recordarlos a todos los que han partido, pero también es saludable recordarles a los que viven que la ciudadanía espera siempre más de cada uno de nosotros.
No sólo hay que cumplir con los principios del periodismo. El hombre de comunicación es un ciudadano más que debe comprometerse a investigar con seriedad los hechos que afectan a miles y que, por su puesto, alteran el "status quo".
Hoy, que celebramos esta importante fecha en honor al poeta y periodista Gaspar Octavio Hernández, elevamos la oración a nuestro Dios para que bendiga a aquellos profesionales que salen sin temor a buscar la verdad en cada rincón del país. Las condiciones climáticas nunca se han convertido en una barrera para traer la hoja de olivo que los lectores, televidentes o radioescuchas desean ver.
Que este día sea una fecha para recordar nuestra noble misión: informar.