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La justicia tarda pero llega, este axioma puede aplicarse en el caso de un señor llamado Hilario Chen Quintana.
El Segundo Tribunal Superior de Justicia emitió un pronunciamiento donde lo condena a cumplir 188 meses de prisión, tras su supuesta participación en el homicidio del empresario Alejandro Ponzada López.
Los brazos de la justicia también alcanzaron a Carlos Alberto Narvaez Dutary (158 meses), Gustavo Hernández (100 meses) y Cristian Cordero (148 meses), por asociarse en perjuicio del comerciante.
Ponzada López pereció el 6 de febrero de 1994 en un incidente violento ocurrido por un asalto a su negocio "Casa de Empeño Vía Porras", acción donde quedan envueltos Chen Quintana y sus secuaces, según sumarias preparadas por el Fiscal Superior Especial, Cristóbal Arboleda, mientras que el acusador particular fue el jurista Genarino Rosas.
El hoy comerciante muerto, dueño de la Casa de Empeño, falleció al recibir varios impactos de bala en su cuerpo.
Gustavo Adolfo Hernández declaró que el día anterior a los hechos, en horas de la noche, recibió una llamada de Hilario Chen Quintana para que lo esperara al día siguiente.
Ese día posterior, a eso de las 7:00 a.m. se reunieron en Vía Porras los señores Hernández (alias Tara). Chen Quintana llegó en un carro color negro conducido por Christian Cordero y acompañado por Aníbal Perea.
Minutos después se dirigieron a la Vía Porras donde esperarían a "un señor que todos los domingos, a eso de las 9:00 a.m. salía de un local comercial con dinero", señalan sumarias del caso.
De repente los antisociales sacaron sus armas para asaltar al hoy occiso, quien logra verlos y se originó un tiroteo en las inmediaciones de la Casa de Empeño, donde Alejandro Ponzada sale con la peor parte.
Las pesquisas realizadas por la PTJ y Ministerio Público dan como resultado que estos elementos tenían las intenciones de robar el negocio, cuyo dueño era el negociante.
Ponzada recibió seis impactos de bala en diversas partes del cuerpo, causándole la muerte.
Hilario Chen Quintana, considerado un cerebro para los asaltos, dijo que "no habían planeado asesinar a Ponzada López, la intención era robar" una pizzería cercana a la Casa de Empeño. |
