La oposición marchó ayer en Caracas, en apoyo a la entrega de las firmas necesarias para convocar un referendo sobre la continuidad en el poder del presidente Hugo Chávez.
La marcha se produce mientras se espera en Caracas al secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), César Gaviria, para proseguir su labor de mediación en el difícil conflicto político venezolano.
La multitudinaria movilización recorrió unos ocho kilómetros en calma, bajo la vigilancia de unos 2.600 efectivos de la Policía Metropolitana y de los cuerpos de seguridad de tres municipios capitalinos.
La marcha fue el preámbulo de la entrega ante el Consejo Nacional Electoral (CNE) de cerca de dos millones de firmas, 800.000 más de las exigidas por la Constitución para que se pueda organizar una consulta popular sobre “materias de especial transcendencia nacional” (en este caso, la renuncia de Chávez).
Las firmas fueron recogidas en los últimos días por la opositora Coordinadora Democrática, que busca cristalizar --a más tardar el próximo mes de enero-- la salida de Chávez del poder a través de las urnas. La marcha partió de la plaza de Altamira, en el oriente de Caracas.
Paralelo al desarrollo tranquilo de la marcha opositora, afectos al Gobierno se concentraron a las puertas del CNE y, en medio de gritos y lanzamientos de petardos, rechazaron la acción supuestamente "golpista" de la oposición. |