Los médicos han recomendado no beber licor,mientras se esté bajo tratamiento, pero muchos empedernidos adictos al "guaro" pasan por alto esta advertencia, poniendo en peligro su vida.
Abstenerse es la fórmula número uno para evitar complicaciones, mientras se toman algún antibiótico. La combinación entre el licor y el medicamento es una mezcla fatal que podría borrar de esta tierra a cualquier ciudadano.
Las personas que violan las reglas de la salud personal suelen ser ciudadanos inconformes con sus vidas, pues la desprecian a tal punto que hacen lo contrario para afectarse terriblemente.
La cultura popular y las amistades incitan al consumo de licor. De acuerdo con sociólogos se ha detectado que el excesivo consumo de licor, es uno de los principales de la desintegración familiar.
Sigamos las recomendaciones y nos irá muy bien. |