¿Hay algo peor que tu mujer te pille buscando una prostituta?... Sí, que la prostituta que pilles sea la madre de tus hijos. Eso le pasó a un hombre de treinta y siete años que visitaba la conocida "zona roja" de Aquisgrán (oeste de Alemania) en busca de prostitutas. Se encontró sorprendentemente con su propia esposa, quien ejercía ese antiguo oficio a sus espaldas.
Parece que ninguno de los cónyuges conocía el secreto del otro, por lo que tuvieron una disputa de proporciones tales que las autoridades se vieron obligadas a intervenir, antes que corriera la sangre. Ambos fueron arrestados. La ciudad de Aquisgrán, situada cerca de la frontera con Bélgica, tiene una calle, la Antoniusstrasse, en la que las prostitutas, al igual que en Amsterdam, se exhiben en escaparates. |