REFLEXIONES
Caja de Ahorros

Redacción
Crítica en Línea
El 5 de julio de 1934, bajo la administración del Presidente de la República, Harmodio Arias Madrid, se funda la Caja de Ahorros y se inicia una nueva etapa bancaria en nuestro país, cuya base principal lo es el pueblo panameño. La entidad ha ido creciendo hasta convertirse en el Banco de la Familia Panameña y su confianza se ha mantenido por encima de ataduras burocráticas que le crean desventaja con relación a los otros bancos del país. Hoy día, las autoridades del banco han iniciado esfuerzos para reforzar la autonomía administrativa, presupuestaria y financiera, que le permita competir en uno de los sistemas de más flexibilidad conocidos en el mundo entero. Esta lucha para adecuar la Caja de Ahorros al régimen bancario, dará la oportunidad a la micro y pequeña empresa, de encontrar en esta institución unas facilidades crediticias para sus inversiones, mayores ahorros y dará también facultades para recibir depósitos de los fondos de las entidades autónomas, lo que a su vez dará mayor solidez y acrecentará la confianza del pueblo panameño. Todo esto dará la oportunidad a que este ente bancario pueda ampliar su marco de función social que a diferencia de la competencia, por su propia naturaleza y ley, así está obligada. También creando un régimen más liberal en la Caja de Ahorros, permitirá que el negocio bancario en Panamá se enfrente a nuevas modalidades porque sabemos que la institución ha liderado la oferta de productos, como los hipotecarios, los diferentes tipos de ahorro, como el navideño y el infantil, que han obligado a la competencia a imitarla en sus pasos. Podríamos decir que tras la fundación, en la década de los años treinta, de la Caja de Ahorros y la lucha que ha emprendido su Gerente General, Carlos Raúl Piad y su equipo es la línea correcta, frente a aquellos que han querido recurrir a la privatización de esta institución, ante la incapacidad de buscar la renovación y la adaptación al mundo actual de economía de mercados.
|