La gobernadora de la provincia de Panamá, Mayín Correa, señaló que la venta de licor después de las 2 de la mañana no ha podido ser regulada porque los dueños de bares y discotecas están presionando a las autoridades, incluyendo al Alcalde capitalino para evitar que esta determinación se legalice.
El alcalde Bosco Ricardo Vallarino negó recibir algún tipo de presión, y aclaró que como empresario y funcionario, cree en la libertad empresarial, porque la iniciativa sugerida por la gobernadora "canibalizaría" a los restaurantes y discotecas.