Reflexionemos... El marcador no importa... Pero a pesar de que Argentina no era el equipo de poder y no jugó bien, el onceno panameño dejó mucha preocupación porque ayer no funcionó en la cancha y lució débil en sus líneas y por momentos completamente desordenado.
La defensa no funcionó y errores atrás permitieron los goles del onceno argentino, que al final se impuso 4-1, con dos tantos que se pudieron evitar.
El equipo panameño lució "lentejo" en el primer tiempo, en el que la delantera no existió.
A destacar las actuaciones de Jair Carrasquilla y James Brown en esa primera parte. Y es que la media cancha panameña fue lo más rescatable.
La línea de tres dio tristeza y no se encontró con un buen juego ante una Argentina por momentos desordenada.
El segundo tiempo fue distinto, Panamá mejoró con la entrada de Angel Lombardo y se dio un mejor toque de la pelota. Pero en seco de los 90 minutos hay muchas cosas para mejorar.
El primer gol llega por un error del arquero José Calderón al entregar la pelota y no desaprovechó el once rival con tanto de Germán Herrera al minuto 9.
Leandro Fernández puso el 2-0 al minuto 23. César Aguilar aprovechó un error del portero y definió con gran jerarquía en una jugada individual (m.53).
Otros tiros panameño parecían nivelar las cosas al amenazar en buenas acciones, pero Neri Cardozo al minuto 57 puso el 3-1. A los 79" Hugo Colace acabó la historia con el 4-1 ante un penal ingenuo de la zaga panameña, que parecía desesperada.
Este es el primer examen del onceno panameño que debe reecontrar su nivel de juego pronto si desea escribir su historia. |