La grandeza deportiva del extraordinario boxeador panameño Roberto Durán, no podrá ser opacada por ningún hecho circunstancial. El Cholo tiene un sitial en el Salón de la Fama por sus méritos y por su don de gente, lo tiene en el corazón de todos los panameños. Su excelencia atlética, pero además su carisma, combinado con su sencillez, lo hacen ser un hombre querido en el mundo, en especial en América Latina.
Su accidente en Argentina, conmovió los corazones de todos, viajó su nombre por todo el mundo y creó expectación a pesar que el escenario está siendo concentrado en la crisis terrorista de los Estados Unidos. La leyenda viviente panameña, que surgió de barrios populares, hizo que los medios recordaran su biografía y su lucha por llegar a ser alguien.
Todos estamos dándole seguimiento a su estado de salud y "Mano de Piedra" ha tenido, como una ironía de la vida, la oportunidad de darse cuenta lo grande que es y lo que será el día que Dios así lo decida.
Es un momento para que el gobierno o las federaciones mundiales de boxeo o aquellos tinglados a los que dio grandes ganancias, preparen un acto de recolección de fondos para apoyar a este hombre que dio gloria al viril deporte del boxeo y que fue engañado y explotado con los recursos millonarios que recibió durante su carrera. Los panameños y el mundo quieren a este sencillo hombre de El Chorrillo y todos esperamos su pronto regreso al suelo patrio. |