El campeón olímpico de salto largo Irving Saladino alegó ayer ser víctima de racismo por parte del presidente de la directiva de propietarios del edificio Costa Pacific, el chileno Raimundo Valdés, quien el jueves lo increpó cuando llegaba junto a un amigo en un auto recién comprado al inmueble donde había rentado un apartamento con una renta mensual de $1,500.
Saladino dijo que Valdés le exigió que presentara el contrato. Yo me imagino que porque vio llegar a una persona morena, fue ante mí preguntando: ¿quién eres tú?, de una manera bastante, bastante racista", dijo Saladino. "Para mí es racismo, porque me han comentado que lo que dijo fue quién era ese negro maleante", afirmó.
Ayer, Saladino se encontró con que se le desactivó el acceso a la entrada del edificio de modo que para ingresar debía hacerlo por la garita de seguridad.
Sin embargo, Valdés alegó que desactivó la tarjeta de acceso de Saladino, porque no presentó el contrato de arrendamiento en un lapso de 24 horas como se lo había hecho saber y además afirmó que un señor de apellido Sher le subarrendó el apartamento al atleta, lo cual es prohibido.