En aruñazos, golpes y patadas fue como terminó una protesta entre personal administrativo destituido de Colón y unidades de seguridad interna del Ministerio de Educación, ubicada en Cárdenas.
Los quejosos exigían su reintegro, a pesar de que el MEDUCA les había ofrecido su reubicación en otros centros escolares diurnos.
Al momento de conformar la comitiva que iba a ser atendida por la autoridades del Ministerio, se formó el revolcón.
José Herrera, viceministro de Educación, manifestó que los funcionarios que se apersonaron a protestar, todos tienen sus puestos de trabajo y sólo han cesado a 9.
