|
Oxana reitera que ella renunció y no la destituyeron. |
Oxana Fedorova, la policía rusa que hasta hace dos días fue Miss Universo, dijo el miércoles que el peor momento de su efímero reinado fue cuando le preguntaron si practica el sexo oral y anal, y cuál era el pene más grande que ha visto en su vida.
En una entrevista que publicó el diario Komsomólskaya Pravda, Oxana dijo haberse sentido muy bien durante su breve reinado de cuatro meses y confesó estar contenta de haber practicado inglés y recorrer el mundo.
Lo único que lamenta y lo que peor recuerda de estos meses es su participación en el show de Howard Stern, un programa de la televisión estadounidense al que aceptó asistir sin tener "idea alguna" de lo que le esperaba, y pensando que sería una sencilla y cortés entrevista.
Stern, cuya escandalosa fama también llegó hasta Rusia, preguntó a la rusa si se afeitaba los genitales, si se limpiaba en el retrete con el diario Pravda, si practicaba "el sexo oral y anal" y cuál era "el pene más grande" que había visto en su vida.
"Al principio quedé confundida ante tanta grosería, y hasta quise abandonar el programa, (porque) ese reportaje fue el momento más desagradable de mi vida americana", comentó la muchacha.
"Pero después me dije que soy una persona fuerte", agregó Oxana, quien aguantó con humor y dignidad el aluvión de preguntas, tales como si utilizaba el vibrador, si tragaba el semen al practicar el sexo oral, si sus pechos eran naturales y si se había acostado con el dueño del concurso, Donald Trump.
Sólo en un caso el presentador consiguió arrancarle una respuesta clara.
Después de preguntarle si se acostaría "con un hombre de raza negra" y recibir la contestación de que no se lo había "planteado", el presentador fue más concreto y preguntó si practicaría el sexo "con Colin Powell", el secretario de Defensa norteamericano. "Niet", dijo Oxana entre risas.
Fedorova, de 24 años, quiere proseguir su carrera profesional en el Ministerio del Interior o en la cátedra de Derecho Civil de la Universidad de Policía de San Petersburgo, donde ahora recibe $250, entre una beca y un sueldo de profesora.
La beldad confesó que desconocía totalmente la cruda realidad del mundo del "show-business", y ni esperaba ganar ni tenía la más mínima idea de las obligaciones que implicaba ser electa como la mujer más guapa del Universo.
Pero negó rotundamente haber sido despojada de la corona, que dijo abandonar "por voluntad propia" por tres razones: terminar su tesis doctoral en Derecho, cuidar a su abuelo, gravemente enfermo, y volver a instalarse en su querida San Petersburgo, su ciudad natal.
"No sé por qué escriben esas cosas que no tienen ni una pizca de verdad", dijo Fedorova con relación a las versiones de la prensa estadounidense de que se casó en secreto, está embarazada y engordó 14 libras. |