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Serias investigaciones determinan que la lectura puede prevenir el Alzeimer y no hay duda que el bienestar que otorga, mejora la calidad de vida. Los Nobel de Literatura acreditan que se vive bastante leyendo y escribiendo. El promedio de vida de los 10 galardonados hispanoamericanos con este Premio, es de 79 años; cinco de ellos vivieron más de 80 años, tres más de 70 y dos más de 60 años, (68 y 69).
Don Jacinto Benavente, premiado en 1922, vivió 88 años. Gabriel García Márquez galardonado en 1982 y único con vida de ellos, tiene actualmente 74 años y se encuentra escribiendo sus memorias, cuyo primer volumen de tres, se venderá a partir del próximo 10 de octubre. Jorge Luis Borges vivió 87 años; Camilo José Cela murió a los 85; el mexicano Octavio Paz falleció a los 84 años; León Tolstoi, (La Guerra y La Paz), vivió 82. Miguel de Cervantes, vivió 69 años, que son bastante para el siglo XVI en que nació, además de perder un brazo en una guerra y estar 5 años prisioneros de los turcos. Fedor Dostoievski, con 4 obras en los 100 libros de ficción más famosos de la historia contemporánea, vivió 60, que también son muchos, considerando que nació en 1821, tuvo una niñez en la miseria, estuvo deportado en Siberia y sufría de epilepsia.
En Panamá Rogelio Sinán, vivió hasta los 92 años, Renato Ozores 91 años y Dora P. de Zárate falleció a los 89 años. Varios escritores panameños vivos son octogenarios: Eduardo Ritter Aislán, 86 años; Mario A. Rodríguez, 85; Tobías Díaz B., 83; Carlos F. Chang Marín, 80 y cerca Guillermo Sánchez Borbón con 78 años. |
