¡Qué va!, ya nadie ve lo bueno y gratificante que se puede lograr con una buena broma, para alegrarte la vida.
Sino me crees pregúntale al primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, quien luce muy relajado y contento en esta fotografía.
Será ése el secreto de los mandatarios para no sentirse presionado por los problemas.