La Casa Blanca rechazó las últimas exigencias de Corea del Norte para abandonar su programa nuclear militar y estima que los dirigentes de Pyongyang necesitan "tiempo para reflexionar", afirmó su portavoz, Scott McClellan.
Interrogado sobre la insistencia de Corea del Norte en obtener un reactor de agua ligera, McClellan indicó que el documento firmado por Pyongyang en Pekín, durante las negociaciones multilaterales, especifica un programa opuesto cuya primera etapa le exige que abandone sus proyectos nucleares.
Corea del Norte sembró la duda sobre el respeto de su compromiso a renunciar al arma atómica, al advertir la dictadura comunista que no daría el primer paso en el abandono de sus armas nucleares.
"Se nos pide que renunciemos a todo nuestro armamento, pero no hay nada a lo que podamos renunciar", declaró Kim Gye-gwan, vocero norcoreano en Pekín.