César Martínez Valles, de 37 años, salió de casa el pasado jueves a pescar sardinas y no regresó. La muerte lo asechaba. Su cuerpo inerte fue hallado ayer en el lago de Miraflores flotando, entre las algas y la flora marina, al mediodía de ayer. Se presume, de acuerdo con las primeras investigaciones de la Policía Nacional y la PTJ, que César murió ahogado.
Al igual que sus hermanos, César se dedicaba a la pesca artesanal de sardinas como medio de sustento informal. El y sus hermanos residen en Chilibre. El jueves se fue a pescar al muelle de Gamboa algunas sardinas con la intensión de llevarlas y venderlas a buen precio a pescadores en el mismo lugar.
Como de costumbre bajó al muelle con un balde. César se adentraba al agua, introducía el balde y después de ver que dentro había una cantidad específica de sardinas, lo tapaban y sacaban el producto.
Pero, al parecer, César no previó que en el lago hay raíces largas y algas. Se sospecha que se enredó en ellas impidiéndole nadar. Ayer un oficial de la Policía Canalera que realizaba ronda por el área del lago de Miraflores vio en la orilla un bulto, que se asemejaba un cuerpo humano. Detuvo el auto y verificó confirmando sus sospechas.
Al efectuar las verificaciones correspondientes, se determinó que se trataba de César. Los familiares de la víctima no habían reportado su desaparición. |