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Faltando sólo 20 meses para las elecciones del 2004, el PRD bajo la dirección de Martín Erasto Torrijos Espino, no tiene compañeros de alianza. Con la excepción de Rubén Blades, quien hizo declaraciones de que le gustaría ser ministro en el Gabinete de Martín, nadie más se ha pronunciado al respecto.
Todos debemos recordar que Rubén Blades ha sido un desencanto político y no ha cambiado, hasta el momento evita la prensa y en las pocas declaraciones que ha dado sobre temas políticos es muy esquivo. Para muchos bajo esta circunstancia el aporte de Rubén Blades seguiría siendo nulo.
Según analistas consultados por mi persona, el PRD tiene la imagen de ser un partido bajo una conducción autocrática, estalinista, donde impera la imposición a la democracia partidista tanto la membresía, como los simpatizantes así lo dicen, y esto ha hecho retroceder la imagen del PRD a la época de la dirección militar y por lo tanto lleva esta ancla para el 2004.
Por el momento el PRD no ha proyectado una imagen de triunfo ante la ciudadanía, todo lo contrario se presenta como un partido donde impera la corrupción, su dirigencia ha sido mencionada en varios casos; su unidad otras veces, su grito de batalla, es ya sólo un mito, inclusive ya se habla de "artilleros" dentro del PRD,.
En los tres años de conducción de Martín Torrijos, el Partido no ha convocado a un acto de masas que haya demostrado su liderazgo, el caminar de Martín no ha despertado a la fecha ningún entusiasmo electoral. Sus elecciones a lo interno no han sido un dechado de virtudes, todo lo contrario, la impresión que ha quedado es que es un partido que no camina por el sendero de la democracia.
Por otra parte el PRD, con la candidatura de Martín Torrijos no consigue partidos políticos con fuerza electoral significativa que decidan acompañarle en las próximas elecciones.
Por otra parte se sabe que ante este escenario que proyecta el PRD importantes financistas del partido han decidido mantenerse al margen, inclusive han renunciado al PRD, por lo que se asegura que tendrá grandes dificultades para afrontar los gastos de una campaña política como la del 2004.
Alguien dijo en una ocasión que el PRD, "era un gigante con pies de barro", eso es una verdad, esa es la imagen que bajo la conducción de Martín Torrijos proyecta el PRD, y eso desde luego es una imagen de derrota. |
