Terry, un vendedor de autos en apuros, encabeza al grupo de ladrones sin experiencia; Martine, es una ex modelo que contrata a los ladrones por órdenes del Gobierno británico para recuperar unas fotografías que comprometen a la familia real.
Desde el momento en que los ladrones alcanzan el botín después de cavar un túnel de 40 pies de largo construido desde el sótano de Le Sac, una tienda de productos de belleza ubicada a pocos metros del banco, y que pasaba por debajo del restaurante Chicken Inn, hasta llegar a la bóveda, el filme gana en fluidez y suspenso.
Un radioaficionado es quien alerta a la Policía cuando enciende su radio de frecuencia corta, tratando de contactar a un amigo en Australia, pero en su lugar se topa con una conversación de los ladrones.
Por el momento, los oficiales no toman en serio el reporte, pero después de tanto insistir decidieron tomar en serio el llamado. La policía revisa 750 bancos en los alrededores del área de Londres, poniendo especial atención en los 150 bancos ubicados a una milla de donde se registrará el robo.
Los delincuentes siguen con su tramado plan, y al ingresar a las bóvedas descubren que lo que hay en las cajas de seguridad del Lloyds Bank, además del dinero y las joyas, son ciertos documentos escandalosos en los que están implicados una princesa de la familia real, la mafia de la pornografía y la prostitución que tienen fotografías comprometedoras de funcionarios importantes y policías británicos que reciben sobornos.
