Un grupo de supuestos comisionistas fueron desalojados de la Caja del Seguro Social-Especializada, según conoció este medio de una fuente confiable.
Estas cinco personas acosaban a los familiares de víctimas que llegaban al cuarto de urgencia de la Caja del Seguro Social, y les hacían ver que podían ser una especie de puente con los servicios de diversas agencias funerarias, a fin de mitigar su dolor, sustentó la fuente.
No es la primera vez que ocurren problemas con funerarias y personas, pues en fecha reciente, una doble pena aquejó a los parientes del jubilado Augusto Mosquera.
No sólo por la muerte del trabajador que falleció a consecuencia de un infarto que hizo mella en su pobre corazón, sino que un negligente que labora en una funeraria local entregó el cuerpo sin vida a otros panameños.
En cuestión de pocos minutos cremaron el cadáver, y no se descartan que los familiares de Mosquera y Henry Lewis, ambos fallecidos del corazón, procedan legalmente contra la Funeraria.
La razón les asiste en este insólito caso. Directivos de diversas agencias funerarias visitaron en fecha reciente a la Procuradora General de la Nación, Ana Matilde Gómez, para exponer la situación existente.
