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El funeral de Peter Ganci, jefe de los bomberos de Nueva York fallecido durante el atentado a las Torres Gemelas.  |
El presidente George W. Bush dijo que Estados Unidos debe prepararse para una guerra larga, y advirtió que sacará de sus madrigueras a los responsables de los atentados contra las Torres Gemelas y El Pentágono.
"Estamos en guerra", aseguró Bush poco después de señalar como sospechoso número uno al saudí Osama Bin Laden. "Estamos planificando una amplia y sostenida campaña para proteger a nuestro país y erradicar el demonio del terrorismo".
Bush reconoció que el camino hacia la victoria puede ser largo". Toda persona que vista el uniforme americano debe estar preparada, y aquellos que le hacen la guerra a Estados Unidos han elegido su propia destrucción", sentenció.
"Vamos a encontrar a los que lo cometieron (el atentado), y los sacaremos de sus guaridas (...) para llevarlos ante la justicia", agregó Bush.
Por su parte, el general Collin Powell dijo que Pakistán -país también islámico y vecino a Afganistán, donde tendría sus santuarios Osama Bin Laden-, podría apoyar los esfuerzos de lucha antiterrorista de Estados Unidos.
El líder supremo del movimiento talibán que gobierna Afganistán instó a los musulmanes de su país y del mundo, a que encaren con firmeza la amenaza de un ataque estadounidense y que se preparen la guerra santa. |