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"Esta nación es pacífica, pero feroz cuando se enoja", dijo Bush en una misa en la catedral de Washington. Además advirtió que todavía existen amenazas de nuevos atentados.  |
El presidente George W. Bush declaró ayer a su país en estado de emergencia mientras se prepara para vengarse militarmente de los atentados aéreos atribuidos a extremistas árabes. Bush convocó a servicio activo a 50,000 reservistas. Paralelamente, el Senado le otorgó amplios poderes para emplear la fuerza necesaria y apropiada contra las naciones, organizaciones o personas que hayan planificado, autorizado, cometido o ayudado" a ejecutar los atentados terroristas.
Bush visitó ayer el área del World Trade Center y fue recibido con gritos patrióticos de "U-S-A, U-S-A".· Dios bendiga América" exclamó a través de un megáfono el presidente entre la masa de bomberos, policías y equipos de rescate que se agolpaban en torno a él. Sin traje y con cazadora, Bush recorrió el centro de Manhattan a pie.
Cazas de la Fuerza Aérea escoltaron el avión presidencial, Air Force One, desde su salida de Washington hasta un aeropuerto militar en el estado de Nueva Jersey, al otro lado del río frente a Manhattan. Luego Bush llegó al àrea de las Torres Gemelas en un vehìculo blindado y fuertemente custodiado. |