Hace rato queríamos escribir sobre este gran cantante cubano, y por fortuna llegó a nuestras manos el libro "Así era Beny Moré", cuyo autor es el licenciado Plinio Cogley Quintero, quien nos dijo: "Haciendo una adaptación y agregando algo de nuestro conocimiento del tema, le hacemos esta entrega".
Bartolomé Maximiliano Moré (apellido de su madre) nació el 24 de agosto de 1919, en el barrio de Pueblo Nuevo, de Santa Isabel de Las Lajas, provincia de Las Villas, en la República de Cuba. "El bárbaro del ritmo", como se le conocía, fue un enamorado de nuestro país, apenas tenía la oportunidad se aparecía por Panamá, para visitar a sus amigos. Dicen que fue contratado en siete ocasiones, para amenizar bailes de carnavales o espectáculos en vivo.
La primera vez que estuvo en Panamá, fue en 1947, procedente de México donde residía, y participó del carnaval de Colón, contratado por el empresario Víctor Cano, para que cantara en el toldo "La Cocaleca", esto fue muy interesante, ya que al Beny le gustó mucho esa tamborera. Se la aprendió y se llevó la partitura, posteriormente la grabó acompañado por la orquesta de Mariano Mercerón, la cual fue todo un éxito, es preciso señalar que Beny grabó otras dos piezas de autores panameños "Qué te parece cholito" del compositor pedasieño Ulpiano Herrera, que hizo con el acompañamiento de la Orquesta de Dámaso Pérez Prado y el boleto "Por ser como tú eres" de José "Tololo" Slater Badam, grabado con la orquesta de Ernesto Duarte.
El Beny, simbolizaba al típico cubano, amaba a su tierra, su Patria de tal manera que estando en México, donde triunfaba, recibía honores, alabanzas, las mujeres lo adoraban, ganaba dinero a montones y aclamado por miles, le dijo a sus hermanos: "Si yo me muero fuera de Cuba, te pido que me lleven a Cuba y que me entierren en Santa Isabel de Las Lajas". Moré murió el 19 de febrero de 1963 tenía 44 años, víctima de una cirrosis hepática, causada por su gran afición a ingerir grandes cantidades de bebidas alcohólicas, dicen que tomaba diariamente, se asegura que en los bailes jamás cantó sobrio.
Sus mejores amigos en Panamá eran Hugo Randino, Tarro Randino, Antonio "Toño" Díaz, Fernando Guillén y "Mono" Pérez. Beny fue bohemio, sincero, machista, mujeriego, pero sobre todo fue un cubano auténtico.