Rodrigo Rato, director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), opina que los ciudadanos de América Latina "están perdiendo la paciencia" porque el crecimiento económico no repercute en sus niveles de vida.
Rato estima que "las tasas de crecimiento no son trasladadas a un mayor bienestar, como consecuencia de insuficientes bases tributarias, malos servicios públicos, falta de infraestructuras sociales y de sistemas financieros sólidos y competitivos".
Rato considera que "todo esto tiene consecuencias muy dramáticas en la vida diaria de los ciudadanos".
La región "tiene diferencias sociales muy considerables que requieren un aumento de las bases fiscales, inferiores al 15 ó 14% del Producto Interno Bruto, y es muy difícil llevar a cabo políticas de inversión social", añade Rato.