¡Lástima que no se llenó! Los que no fueron, no saben lo que se perdieron. Para muchos, el mejor concierto de los que han asistido.
Tony Meléndez, ese que nació sin brazos, pero con un talento por "encima del nivel" puso a llorar a los que estuvieron en el concierto "Si yo puedo, tu puedes!
Combinando su música con las cosas que le han sucedido en 43 años de vida, Tony arrancó además de los aplausos, lágrimas en los rostros de los presentes.
Jóvenes, adultos y hasta los campeones mundiales del béisbol Pre-intermedio, notaban como sus ojos se "agüaban" al escuchar los mensajes de esperanza que Tony emitía.
En el concierto, el cual inició Tony con el tema "Si yo puedo", tomó sabor cuando al ritmo de los Beatles interpretó el clásico "Lady in By", "Cantemos con alegría" y "Sabor a mí"; entre otros.
"Un beso me cambió la vida y fue el de Juan Pablo II, quien me dijo que siguiera adelante y es lo que estoy haciendo", aseguró emocionado el artista.
Su hermano José, que lo acompaña a todos lados, dio su testimonio y dijo que Tony le ha hecho conocer muchas cosas. Incluso a él se le salieron las lágrimas al confesar que pidió a su madre "un hermano completo".
Estaban chicos y Tony vio la escena. Al verlo rompió a llorar y fue a buscarlo, pero éste lo que hizo fue retarlo a jugar con un disco. José se lo tiró, y Tony lo agarró con los hombros.
¡Prepárate, le dijo Tony! Iba con tanta fuerza que hasta la nariz le rompió.
"Desde ahí, sabía que no era un hermano especial, sino superior", aseguró José, mientras el público aplaudía.
Al ritmo de "La Bamba" y nuevamente "Si tu puedes", Tony cerró el concierto, el cual llenó las expectativas de todos y por supuesto de los organizadores, la fundación "Soy exitoso".
